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Esta es la 'combinación ganadora' para adelgazar y estar en forma
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Esta es la 'combinación ganadora' para adelgazar y estar en forma

Los expertos dicen que el ayuno intermitente junto con el ejercicio intenso proporcionan importantes beneficios para la salud

Foto: Hidratarse es clave cuando vas a realizar ejercicio. (istock)
Hidratarse es clave cuando vas a realizar ejercicio. (istock)

La obesidad es una enfermedad compleja y multifacética que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se asocia con numerosos riesgos para la salud, incluidas enfermedades cardíacas, diabetes y ciertos cánceres. Pero, para las mujeres, el camino hacia la pérdida de peso puede ser particularmente desafiante, debido a diversos factores como las fluctuaciones hormonales que pueden afectar al peso, al apetito y a la distribución de la grasa o la adaptación metabólica, ya que cuando las mujeres con obesidad intentan perder peso, sus cuerpos a menudo experimentan una adaptación metabólica, donde el metabolismo se ralentiza para conservar energía, lo que, a su vez, hace que sea cada vez más difícil seguir perdiendo peso incluso manteniendo un déficit calórico.

Ahora, un reciente estudio publicado en la revista Plos One y liderado por los investigadores Rania Ameur y Rami Maaloul de la Universidad de Sfax en Túnez, expone que combinar una alimentación restringida en el tiempo, lo que conocemos como ayuno intermitente, asociada a ejercicio intenso, es la combinación ganadora para obtener los mejores resultados perdiendo peso que haciendo cualquiera de las dos cosas por separado.

Foto: Ilustración: CSA-Printstock.
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Ayuno + dieta

Según los expertos, combinar una alimentación con tiempo restringido con entrenamiento funcional de alta intensidad podría mejorar la composición corporal y los parámetros cardiometabólicos con mucha más efectividad que cualquiera de las dos prácticas por separado.

La fórmula de incorporar ejercicio a una dieta saludable es bien conocida tanto para mejorar la salud cardiometabólica como para perder peso. Sin embargo, encontrar la combinación adecuada de cambios en el estilo de vida para producir resultados sostenibles puede resultar un tremendo desafío.

placeholder La alimentación con restricción de tiempo y el ejercicio de alta intensidad pueden trabajar juntos para mejorar la salud (Pexels).
La alimentación con restricción de tiempo y el ejercicio de alta intensidad pueden trabajar juntos para mejorar la salud (Pexels).

Parámetros del estudio

Los investigadores asignaron a 64 mujeres con obesidad a uno de los tres grupos estructurados: en el primero, las participantes llevarían una alimentación con tiempo restringido (solo dieta); en el segundo grupo, se les asignó entrenamiento funcional de alta intensidad (solo ejercicio); y en el último grupo, las voluntarias llevaron una alimentación con tiempo restringido (ayuno intermitente) más entrenamiento funcional de alta intensidad (dieta con ayuno intermitente y ejercicio).

Las participantes que siguieron únicamente el plan de alimentación con horario restringido consumieron sus comidas exclusivamente entre las 8 a. m. y las 4 p. m. Aquellos en los grupos de entrenamiento funcional realizaron sesiones de ejercicio tres veces por semana bajo la guía de un instructor. Después de 12 semanas, los tres grupos mostraron una notable pérdida de peso y reducciones en las medidas de cintura y cadera. Además, todos los grupos demostraron mejoras en los perfiles de glucosa y lípidos.

"Las mujeres con obesidad experimentaron mejoras en la composición corporal y la salud cardiometabólica"

El grupo con mejores resultados

Sin embargo, hubo algunas diferencias entre los resultados de los grupos. Los investigadores descubrieron que las mujeres con obesidad tenían una mejor composición corporal y una mejor salud cardiometabólica después de completar un programa de 12 semanas en el que se combinaban estos dos métodos en los que el ejercicio se llevó a cabo justo después de terminar el descanso de la comida, es decir, el último grupo que combinaba todas las pautas del experimento. Las mujeres del tercer grupo experimentaron cambios más profundos en la composición corporal y los parámetros cardiometabólicos que con la dieta o el ejercicio solos.

"Combinar una alimentación con restricción de tiempo con un entrenamiento funcional de alta intensidad es una estrategia prometedora para mejorar la composición corporal y la salud cardiometabólica", concluyen los expertos.

Pese a estos resultados, los autores también exponen que se trata de una muestra muy pequeña de participantes, por lo que es difícil determinar si los efectos son extrapolables a una escala mayor.

La obesidad es una enfermedad compleja y multifacética que afecta a millones de personas en todo el mundo. Se asocia con numerosos riesgos para la salud, incluidas enfermedades cardíacas, diabetes y ciertos cánceres. Pero, para las mujeres, el camino hacia la pérdida de peso puede ser particularmente desafiante, debido a diversos factores como las fluctuaciones hormonales que pueden afectar al peso, al apetito y a la distribución de la grasa o la adaptación metabólica, ya que cuando las mujeres con obesidad intentan perder peso, sus cuerpos a menudo experimentan una adaptación metabólica, donde el metabolismo se ralentiza para conservar energía, lo que, a su vez, hace que sea cada vez más difícil seguir perdiendo peso incluso manteniendo un déficit calórico.

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